Historia de los judíos en Mallorca: Breve Cronología
Historia de los judíos en Mallorca, donde la comunidad hebrea, aunque históricamente pequeña, dejó un legado cultural notable. Su presencia en la isla se remonta a la época romana, con vestigios que datan del siglo V a.C. Tras la conquista de Mallorca por Jaime I de Aragón, se desarrolló un barrio judío (el Call Maior) que floreció y luego se diluyó a la sombra del Palacio de la Almudaina. Aunque tuvo una pequeña representación su presencia dejó una huella significativa en la cultura y la historia de la isla. A continuación una breve cronología sobre la presencia judía en Mallorca. Consulta aquí un artículo sobre la judería o Barrio Judío de Palma de Mallorca
Historia de los judíos en Mallorca: Siglo V
La presencia judía en Mallorca se remonta, en sus orígenes, al siglo V, aunque se cree que ya existía una comunidad judía durante el período de expansión romana en el archipiélago. Vestigios arqueológicos confirman la presencia hebrea en Mallorca coincidiendo con la dominación romana de Baleares.
Los judíos en Mallorca bajo el dominio Árabe
Definitivamente es un hecho; la comunidad judía creció bajo el dominio árabe. La presencia judía en Mallorca bajo dominio árabe (siglos X-XIII) fue un fenómeno complejo, no solo de supervivencia, sino también de integración y participación en la vida económica y social de la isla. Los judíos tuvieron presencia activa en Mallorca desde tiempos antiguos, y su número aumentó durante la dominación musulmana, participando en las rutas comerciales y en las redes que conectaban Mallorca con la península ibérica.
Durante este período dela historia de los judíos en Mallorca, muchos miembros de la comunidad hebrea fueron importantes comerciantes en el Mediterráneo Occidental y destacaron, especialmente, en la ruta comercial con el norte de África. Se sabe también que durante este período hubo una población mozárabe, una comunidad cristiana que vivía bajo dominio musulmán en la Península Ibérica, manteniendo libremente su fe y su cultura católica.
Historia de los judíos en Mallorca: Siglo XII
En el siglo XII, la presencia judía en Mallorca era notable y continuaba creciendo tras la conquista árabe. La comunidad judía se asentó en Palma, donde la judería (barrio judío) era un espacio con economía y vida propias. Estaba dotada de servicios al rey y con una fuerte identidad cultural, incluyendo la lectura y escritura en hebreo y en mallorquín. Recordemos que los judíos de Mallorca, eran considerados propiedad del rey y debían prestarle servicios a cambio de ciertas ventajas. La comunidad judía en Mallorca se menciona en las crónicas de la razzia pisano-catalana en 1114.
Historia de los judíos en Mallorca: Siglo XIII
Mallorca fue un centro de creación y difusión de cultura, donde la comunidad judía jugó un papel importante en la navegación, astrología, matemáticas y filosofía. Después de la conquista de Mallorca por Jaime I, la comunidad judía se vio beneficiada por su ayuda en la guerra, y se extendió por otras localidades de la isla como Inca, Felanich, etc. En esas fechas se informa de la expansión del barrio judío establecido junto al Palacio Real de la Almudaina. Hasta este momento los judíos tenían una organización política, administrativa y social paralela a la cristiana, llamada «aljama», que regulaba su vida y sus costumbres.
Jauma II y el Call Maior
La segregación de los judíos de Mallorca por parte del rey Jauma II se refiere a un período histórico en el que el Jaume II, rey de Mallorca, ordenó el traslado de la población judía desde el Call Jueu (Barrio Judío) a un nuevo barrio denominado el Call Major, en Palma de Mallorca. Este acto, aunque no estrictamente de persecución en el sentido de violencia o exterminio, sí fue un acto de segregación y restricción de los judíos, que tuvo consecuencias en su vida cotidiana.
En Palma de Mallorca, los judíos vivían en un barrio llamado Call Jueu, que tenía su propia estructura y vida comunitaria y en 1303, Jaume II, asesorado por el obispo Ponç Desjardí, ordenó el traslado de los judíos a un nuevo barrio, el Call Major, también conocido como el Call Nuevo, donde los judíos debían vivir y dormir. Este traslado implicó una separación física de la comunidad judía y una restricción en su vida cotidiana.
1391: Pogromos contra los judíos de Mallorca
En 1391 se produjeron notables pogromos -linchamientos multitudinarios, espontáneos o premeditados sobre un grupo particular, étnico o religioso- contra la comunidad judía en varias ciudades de España, incluyendo Mallorca, con el pretexto de obligar a los judíos a convertirse al cristianismo. Estos pogromos se caracterizaban por la irrupción de multitudes en la judería, saqueos, matanzas y la destrucción de propiedades. En Mallorca, la persecución a la comunidad judía se reflejó en la destrucción de su barrio, la judería (donde se llevaban a cabo sus actividades religiosas y sociales) y la violencia contra sus habitantes.
Durante los pogromos de 1391, este barrio fue atacado y saqueado por una multitud, que incluyó clérigos y criados de las casas nobles. Como resultado, la comunidad judía sufrió grandes pérdidas y se vio obligada a convertirse al cristianismo para evitar más persecuciones.
Siglo XV: Expulsión de los judíos de Mallorca
Durante este período de la historia de los judíos en Mallorca se intensifica la persecución por parte de la Inquisición y una gran parte de la comunidad judía de la isla se convierte al catolicismo por obligación. A pesar de los pogromos, la comunidad judía continuó viviendo en Mallorca durante algunos años, pero finalmente se vio obligada a abandonar la isla en 1492, tras la expulsión de los judíos de España decretada por los Reyes Católicos.
En resumen, los pogromos de 1391, incluyendo los ocurridos en Mallorca, fueron una respuesta violenta contra la comunidad judía con el objetivo de obligar a su conversión al cristianismo, lo que causó grandes pérdidas y sufrimientos a la población hebrea. La judería (un ghetto judío, en toda regla), como barrio de residencia de los judíos, fue uno de los objetivos de la violencia y el saqueo. La expulsión de los judíos de España en 1492 marcó el fin de la presencia judía en Mallorca.
Chuetas:
El término «chueta» proviene del catalán «juetó», un diminutivo de «jueu» (judío). La población conocida como «chueta» es la descendencia de los judíos conversos que han conservado una identidad cultural distintiva. Tras la conversión forzosa de los judíos mallorquines entre 1391 y 1435, un grupo permaneció en la isla, manteniendo prácticas criptojudías. O sea, que fueron convertidos al catolicismo, pero mantuvieron su fe judía en secreto al punto de llegar a practicar una fuerte endogamia, casándose entre ellos durante siglos.
Aunque algunos asimilaron finalmente el cristianismo, la sospecha de judaísmo en secreto les llevó al más estricto ostracismo. Los chuetas fueron discriminados por la sociedad mallorquina y, en algunas ocasiones, perseguidos por la Inquisición. La percepción de los chuetas como una amenaza a la pureza religiosa y social los llevó a ser blanco de la persecución de la Inquisición y la hostilidad de las clases populares influidas y obnubiladas por el miedo.
A propósito: ¿Vienes a Mallorca en viaje de vacaciones? Si te resultara de ayuda, también puedes consultar nuestra guía de viajes a Mallorca y más info turística relativa a la isla.